domingo, 29 de septiembre de 2013

Una más en la familia

Hola, hoy vengo para presentaros a Laia. Es una perrita de tan solo mes y medio. A mi madre le dio un arrebato y la compró, así, sin contar con nadie. Que le de un arrebato con un bolso lo entiendo, ¿pero con un perro?

Bueno Laia no tiene la culpa, así que todos cuidamos de ella. Es muy pequeña, y al igual que los bebés pasa la mayor parte del día durmiendo. Le gusta refugiarse en tus pies y morder tus zapatillas. La estamos educando, de momento ya sabe dónde debe hacer pipí, aunque aún así hay alguno que se le escapa...
También le enseñamos que no debe morder. La primera noche lloró mucho, tenía miedo y echaba de menos a sus hermanos, con los que estaba en la tienda. Pero ya se ha acostumbrado a nosotros, y esta noche ha dormido como un lirón. Lo del nombre fue una locura, primero fue Dana, un nombre que yo elegí, después Tonia, un nombre que eligió mi hermano, os recuerdo que él no tiene buen gusto para los nombres. Y por último Laia, fue el nombre que más le gustaba a mi madre y a mí también me gusta.

En cuanto le pongan las vacunas podremos sacarla a pasear. La veterinaria nos dijo que es un Bichón Maltés. A estos perros les crece mucho el pelo, parecen mantas, a nosotras no nos gusta, así que la llevaremos a la peluquería para que mantenga el pelo igual de largo que ahora. Pesa 1,100 kg. 

Todos le hemos cogido cariño. Mi casa parece un zoo, Cobi, Laia y Rojo, mi pez. Esto demuestra mi pasión por los animales. Hasta pronto.

¡El trabajo que me costó que mirara a cámara!

Laia